Desde que se fue, Pep Guardiola, ha sido el eterno regreso imposible. No es la primera vez que niega la mayor. Lo que si ha dejado claro, es que pronto tomará otro tipo de decisiones.
Desde que dejó el banquillo del FC Barcelona en 2012, el nombre de Pep Guardiola ha estado ligado de forma recurrente a un posible regreso al club de su vida. Sin embargo, a lo largo de los años, el técnico de Santpedor ha sido claro —y cada vez más rotundo— en sus declaraciones: no contempla volver al Barça, ni como entrenador ni como dirigente.
Últimas palabras en RAC1: ‘Fue muy bonito, pero se acabó‘
En su entrevista más reciente en RAC1, Guardiola zanjó cualquier especulación con una frase lapidaria:
“¿Volver al Barça, en el palco con corbata? No me veo. Ya se acabó. Fue muy bonito, pero se acabó para siempre”.
El actual entrenador del Manchester City dejó claro que no se ve en un rol institucional en el club catalán y que, una vez finalice su etapa en Inglaterra, su intención es alejarse del fútbol durante un tiempo.
“No sirvo para eso. Cuando acabe en el City, me alejaré del fútbol por un tiempo”, añadió.
Al final, nada nuevo y un discurso coherente en el tiempo. Estas declaraciones ya no nos son nuevas vamos. Guardiola ha mantenido una línea constante en sus intervenciones públicas, con respecto al Barça se refiere.
- 2013 (en su presentación con el Bayern): “Mi etapa en el Barça fue la mejor de mi vida, pero no se puede repetir”.
- 2016 (al llegar al Manchester City): “No volveré a entrenar al Barça. Ese capítulo está cerrado”.
- 2021 (en una charla con la Fundación Cruyff): “No me veo como presidente ni como director deportivo. No tengo esa capacidad”.
- 2023 (tras ganar el triplete con el City): “Estoy feliz aquí. El Barça siempre será mi casa, pero no tengo intención de volver”.
Guardiola y el peso del pasado
El técnico catalán ha reconocido en varias ocasiones que su etapa en el Barça fue tan intensa y exitosa —con 14 títulos en cuatro años— que resulta irrepetible. La presión, el desgaste emocional y la exigencia del entorno culé son factores que él mismo ha citado como razones para no regresar. Aún recordamos aquellas palabras premonitorias. «Ens farem mal», (Nos haremos daño).
Además, Guardiola ha mostrado respeto por los proyectos en curso en el club, evitando interferencias o declaraciones que puedan generar inestabilidad.
En conlcusión, aunque el barcelonismo sueña con un regreso de Pep, ya sea en los banquillos o en los despachos, el propio protagonista ha sido tajante: su historia con el Barça ya se escribió, y no habrá segunda parte. Su legado, sin embargo, sigue vivo en la memoria colectiva del club y en el estilo de juego que aún inspira a generaciones.

